Y se rompió...

La esperanza, la alegría. Todo se rompió. 

O no...

Todo parece estar bien. Todo se está arreglando. Todo se está reconstruyendo.

...¿Pero es eso lo que realmente quiero?...

¿Aún me ilusiono? 

¿Aún te espero?

...

No sé por qué continúo luchando... No sé si por costumbre, porque amo, o porque no veo más allá.

No sé si debería desistir. 

Hasta ahora he conseguido aquello por lo que he luchado, pero empiezo a pensar que no todo lo que se desea es lo que se merece.

¿Acaso debería soltar?¿Debería empezar de nuevo? ¿Debería olvidar?

¿Qué ocurre? 

Basta ya de parecer la pobre chica. La que siempre tiene mala suerte o la chica a la que le fallan una y otra vez.

Nada de eso.

Soy la que ha superado cosas que muchos siquiera podrían imaginar. 

Soy la que tocó fondo no, (eso se quedaría corto) y volvió a sonreír y a caminar.

Soy esa que parece ingenua, pero que consigue lo que se propone y mucho más.

Basta ya de escribir y sentir penas.

Hola, yo. Te echaba de menos.

¿Qué problema tengo? ¿Por qué se me imposibilita ser feliz, estar bien? 

Estoy cansada. Muy cansada de luchar, de sonreír, de ser quien tira de todo, quien no se puede quejar, quien no puede decir nada. Cansada.

Agotada...

Tantos desprecios... Tantos desplantes, tanta indiferencia... 

No creo que pueda con esto mucho más. La cuerda está muy tensa y pronto se va a romper.